5 jun 2014

Explicando qué hacemos en ESF a niños y niñas de 3 años


Cuando desde el CEIP Campomaior de Ordes nos invitaron a esto nos lo pensamos mucho. Era todo un reto contar a qué nos dedicamos quienes estamos en ESF a un público tan joven sin caer en el simplismo de "ayudar a los pobres negritos", sin más.

Al final pensamos en dos juegos sencillos para explicar en qué consiste lo que hacemos, y consultamos tanto con voluntarias de ESF que son profes (¡gracias por los comentarios, Yoli!) como con la profe, sobre qué tal pensaban que podrían funcionar. 

Después de presentarnos y contarles que para explicarles nuestro trabajo íbamos a jugar, ¡empezamos!

El primer juego consistió en colocar un montoncito de 21 caramelos (tantos como niñxs) en una mesa. En estos casos, los caramelos blanditos y sin gluten (mejor de comercio justo, claro), suelen funcionar. Por supuesto, al sacar los caramelos hubo jaleo y de paso que se tranquilizaban los ánimos, se les pidió que no se comieran los caramelos que cogieran. Además, hubo niñxs (5) a quienes no les gustaban los caramelos y no participaron tanto, aunque se animaron cuando les mencionamos que no se preocuparan, que en el juego siguiente iba a haber sorpresas para ellos (las pegatinas sí que no fallan nunca a estas edades ;D). 

A algunos niños y niñas se les colocó cerca del montoncito y otros mucho más lejos. 

 A la derecha, los caramelos sobre la mesa, con un grupo de niños más cerca y otro más lejos


Entonces se les pidió que, a la de tres, cogieran los caramelos que quisieran del montoncito.

Algunxs, claro, cogieron muchos y otrxs (especialmente lxs que estaban más lejos), se quedaron sin ninguno. Fue sorprendente el hecho de que muchxs solamente cogieron uno (pudiendo haber cogido más).

Luego nos sentamos, preguntamos a alguien de los que no tenía ninguno si se sintió contento cuando vio los caramelos y cómo se sintió al no haber podido quedarse con ninguno. También se les puede preguntar por qué creen que no consiguieron caramelos (aquí se supone que mencionarán el hecho de que estaban muy lejos del montón y ya no quedaban cuando llegaron).

También preguntamos a quien tiene caramelos qué les parecía que haya compañeros que no tengan... La idea era ver si serían capaces de empatizar (según dinámicas con niños un poco más mayores suele salir bien, pero no sabíamos que pasaría al ser tan pequeñitos) y vislumbrar un poco el concepto de injusticia. Fue unánime que era malo que hubiera quien se había quedado sin ninguno.

A continuación pedimos a los que tenían más de un caramelo que repartieran con los que no tenían, hasta que todo el mundo tuviera uno, supervisando el proceso (tratando de convencer a alguno si no quería, etc., en este caso no hizo ni falta, se desvivieron porque ninguno se quedara sin caramelo).

Si alguien quiere emplear esta dinámica y piensa que, por espacio o por el grupo de niñxs, el tema del montoncito puede ser problemático, se puede repartir los caramelos directamente (a unos 1,2,3,4 y a otros ninguno), pero se pierde bastante del juego (ya que se trata de que sean conscientes de que no pudieron llegar a los caramelos porque otros que estaban más cerca se quedaron con todos, no simplemente porque al repartírselos a unos les dieron más que a otros). Al reflexionar sobre esto y también cuando todos tengan uno y estén contentos, creemos que la percepción puede cambiar de si a "se les dio" el caramelo a de si son conscientes de que cogieron más porque estaban más cerca... (pero lo dicho, en algún caso se puede considerar que puede ser mucho caos y no compense, en cualquier caso para menos de 3 años no creemos que sea aplicable esta actividad).

Con este juego tratamos de explicar tres ideas principales:
  • el hecho de que hay niños, tanto aquí como sobre todo en otros lugares lejanos que no pueden disfrutar de algunas cosas que otros sí que disfrutan, y que eso no es "por mala suerte" o "porque sí", sino por algún tipo de desigualdad con una causa evitable
  • La segunda cosa importante a transmitir es el hecho de que ellos pueden hacer cosas para evitar esta desigualdad mala, como compartir, que se van a sentir bien. Nos interesa mucho transmitir lo de que es normal ese reparto (sobre todo si se ve que fue porque unos estaban lejos y otros cerca, y no es muy justo), no simplemente porque "nos da pena".
  • La tercera es que hay personas, como nosotros, que ayudamos a que, igual que en el juego les ayudamos a ellos, la gente que tiene más pueda compartir con los que tienen menos, porque eso es bueno, y es normal que todos tengan un poquito mejor que que pocos tengan mucho.

Insistimos en que no nos interesaba transmitir sólo el mensaje de "pobrecitos que tienen poco", ya que el mensaje de "simplemente caridad" lo rechazamos en nuestra ONG, hablamos siempre de justicia social, la caridad no cuestiona las causas de la desigualdad, y nosotros creemos que sólo cambiando esas causas se puede acabar con la desigualdad. La simple caridad nos parece un parche...

El segundo juego está basado en el que aparece en el documental "niños de agua", realizado por nuestrxs compañerxs de Ingeniería Sin Fronteras Cataluña.
Se dividieron en tres grupos:
  1. un grupo de gotitas de agua (si se tiene tiempo y materiales, se pueden disfrazar con una bolsa azul o de cualquier otra manera), 
  2. otro grupo de niños y niñas que quieren beber, 
  3. un tercer grupo de "cosas malas que le pueden pasar al agua" (si se desea, se pueden disfrazar con bolsas negras o similar).
Durante el reparto de las pegatinas al grupo 2 hubo mucha expectación, así que tuvimos que hacer un paréntesis y que se sentaran para tranquilizar los ánimos ;D


Hubo dos partes en el juego:

-Primero lxs niñxs-gotita fueron caminando en fila siguiendo “tuberías” que daban varias vueltas por el aula y llegando sin ningún impedimento a los niños y niñas que quieren beber, abrazándose con ellxs. En este caso los niños y niñas del tercer grupo pueden estar mirando sin hacer nada (o, como en nuestro caso, se pueden integrar en alguno de los otros dos grupos y luego rehacer los grupos antes de la segunda parte). Se trata de ilustrar como casi siempre en su casita el agua sale del grifo sin ningún problema para que beban.

- La segunda parte no era tan fácil, ya que entre las gotitas y quienes quieren beber estaban lxs niñxs del tercer grupo. En ese grupo de cosas malas había :

  • Quienes hacen de mosquitos que contagian enfermedades, y tenían que poner pegatinas llamativas (lo ideal, aunque pueden servir post-it amarillos) a las gotitas que traten de pasar a su lado en su camino hacia los niños que quieren beber. Simplemente tendrían que ponerle las pegatinas, sin impedir que las gotitas pasen hacia los niños que quieren beber.


     Ejemplo de plantilla para pegatinas de mosquitos

  • Otros niños que eran suciedad y contaminación y tenían que poner pegatinas (o post-it rosas) a las gotitas que traten de pasar a su lado en su camino hacia quienes querían beber. Simplemente tenían que ponerle las pegatinas, sin impedir que las gotitas pasen hacia los niños que quieren beber.

      Ejemplo de plantilla para pegatinas de microbios y "caca"


  • Otros niños que eran Señores y Señoras que quieren coger gotitas para meter en botellas y luego venderlas, y tenían que "pillar" a las gotitas. Esta parte la entendieron algo menos (sobre todo porque no había pegatinas de por medio...).
Cuando todas las gotitas no "pilladas" habían llegado a lxs niñxs que querían beber, contamos cuántas gotitas han conseguido llegar a quienes querían beber sin llevar puesta ninguna pegatina. Sólo había uno. Les explicamos entonces que en muchos sitios hay niños a los que no les llegan apenas gotitas limpias y que incluso tienen que ir a buscarlas muy lejos, ya que no tienen grifo en su casita. Les contamos entonces que en nuestro trabajo otra cosa que hacemos es trabajar con lxs niñxs y la otra gente que quiere beber para que las "cosas malas que les pueden pasar a las gotitas" desaparezcan (limpiando el agua, ayudando a poner tuberías para que llegue más fácilmente, denunciar a los señores y señoras que quieren quedarse con el agua...).
Algo imprevisto, pero que resultó muy interesante, es ponerse de acuerdo con lxs niñxs y empezar a quitar las pegatinas a las gotitas que las llevaban, como si estuviéramos "limpiándolas". Fue muy divertido y lo mejor es que surgió de ellos mismos. Incluso pusimos pegatinas a la profe para que luego la "limpiaran".
Las pegatinas que sobraron (mejor hacer de más) se las quedó la profe para el próximo día de clase repartirlas y que sirviera de refuerzo y recuerdo. También envió estas explicaciones a los padres y madres para que en casa puedan reforzar lo aprendido (esto me parece clave).

Parece que la cosa gustó, así que esperamos repetir en otros sitios... Muchas gracias a la profe, Filucha, por la iniciativa.

Aquí dejamos enlace a algún otro material para niños y niñas pequeños sobre didáctica de derechos humanos, género, y un cuento bastante chulo sobre la problemática del agua con poesía incluida.

2 comentarios:

alicia dijo...

Que boa idea!!! E que dinámicas máis chulas!

Anónimo dijo...

Me uno, qué guay! :) Enhorabuena!!!